Hace unos meses en mi cumpleaños, mi equipo de trabajo me hizo un regalo como cada año. Cómo es costumbre tienden a regalarme algo que puede gustarme y algo que seguro que no me va a gustar.
Esta vez me ha tocado una muñeca de trapo que de tan fea que es me gusta y una cajita de "Tao Meditación" (en esa época estaba bastante de los nervios).
La cajita en cuestión viene acompañada por:
- Dos kits de ocho piedras del Tao. Los principios fundamentales de la filosofía china.
- Bolsa de satén rojo. Para guardar adecuadamente sus piedras.
- Libro de 160 páginas. Con instrucciones, lecturas e información básica.
Consiste en meter cada kit de piedras (cada una de un color) en un compartimento de la bolsa, mezclarlas y sacar dos piedras, una después de la otra.
Una vez que sacas las piedras y con cuidado de saber cual ha sido la primera, debes buscar en el libro la combinación de las piedras Tao, donde encontrarás un proverbio y una reflexión.
Se supone que debes primero dejar tus preocupaciones a un lado, dejar la mente en blanco, relajarte y otro tipo de ejercicios que yo en el trabajo pues como que no los voy a hacer.
Al principio me hizo gracia y sacaba de vez en cuando las piedras, pero cómo lo único que leía eran reflexiones=obviedades pues me cansé.
Hoy he vuelto a hacerlo mientras espero para seguir trabajando y me ha salido esto:
Combinación Yang-metal
Proverbio: "Aunque un mono vista prendas de oro, tendrá pelo en las mejillas y el culo sucio"
Poema:
Ese hombre tan delicado...
lleva una lanza y una espada,
ese hombre tan delicado...,
¡pulidas grebas y una cinta encarnada!
El pelícano decansa sobre el puente.
En el agua no se ha sumergido.
Ese hombre tan delicado
de la ropa que lleva no es digno.
lleva una lanza y una espada,
ese hombre tan delicado...,
¡pulidas grebas y una cinta encarnada!
El pelícano decansa sobre el puente.
En el agua no se ha sumergido.
Ese hombre tan delicado
de la ropa que lleva no es digno.
Reflexión: en el poema casi puede oirse el choque entre el Yang y el metal, dos poderosas fuerzas a las que les resulta complicado coexistir. Este extraño poema y el gracioso proverbio son la versión china del cuento "El Traje Nuevo del Emperador".
No se deje engañar por las apariencias externas: busque siempre en el interior para conocer la verdad.
¿La verdad? otra obviedad. Y hay más, sesenta y cuatro obviedades nada menos.
Todo esto en una caja de 9x9x9cm.
No se deje engañar por las apariencias externas: busque siempre en el interior para conocer la verdad.
¿La verdad? otra obviedad. Y hay más, sesenta y cuatro obviedades nada menos.
Todo esto en una caja de 9x9x9cm.
Y mira que yo a primer vistazo he pensado que se trataba de unas bolas chinas....
ResponderEliminarEsas también son obvias, pero te hacen pasar un buen rato
Jajaja... yo también! Es que tenemos la mirada sucia... jaja.
ResponderEliminar¡Qué cosas te regalan!
ResponderEliminar¿No te hace pensar en el concepto que tiene de ti tu equipo de trabajo?
pues visto lo visto, yo me quedo con mi crucifijo
ResponderEliminarPara no defraudar me uno a Lena y Bollovillo ajajajajajaj, chica, son cosas que pasan...
ResponderEliminarJoer, pues si que tienes para aburrirte con la cajita 9x9x9cm, al igual me regalo una ;)
Qué cosa más curiosa...
ResponderEliminarLo que pasa es que si una tiene que concentrarse y eso para que le suelten algo que es obvio, a mí me jodería bastante...
Un beso :)
No se... esas cosas chinas... hay que tener mucha paciencia para no acabar tirandole las piedrecitas a alguien....
ResponderEliminarNo voy a ser hipócrita.... yo tambien pensé que eran unas bolas chinas, ajajajajajajaj.
Tenemos el sexo ahí... en la cabeza, ajajajajaja.
Lena, Bollovillo, Cris, La Queli: Mayoría de comentarios en tono sexual cuando yo me marco una entrada de reflexión de lo más seria. ¿Alguien necesita que le ricen el pelo?
ResponderEliminarSakura, bea, ^lunatica que entienden^, o ya lo tenéis rizado o leeís con atención mis entradas o habéis pensado lo mismo que el resto y os calláis, cobardicas.
Mi rizo es natural, pero siempre se puede mejorar.
ResponderEliminarQue cosas tan curiosas... yo no sabía ni que eso existía y la frasecita del mono ¡¡¡sin desperdicio!!!
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